Este fin de semana ha sido muy bueno para el tiro con arco ibicenco
Lleida no defrauda. Si hace unos días nos hacíamos eco de las 50 medallas conseguidas desde 2006, hay que sumar a esta cifra las tres medallas conseguidas en este último Gran Premio.
Miguel Ángel Escandell, medalla de oro
Tras un round clasificatorio donde dominó de principio a fin, Mini se ha ido zafando de sus oponentes en las rondas eliminatorias hasta llegar a la final donde le esperaría Antonio Manuel Gracia.
Siguiendo la trayectoria de su competición, dominó la final de principio a fin y se alzó con la victoria con un resultado de 145 a 138.
Pablo Orozco, una plata que sabe a oro
Tras clasificarse en quinta posición en el round, Pablo Orozco no lo ha tenido fácil para llegar a la final. Ya en semifinales, Marc Pico le puso al límite pero Orozco finalmente se impuso por 6-4.
En la final le esperaría Ken Sánchez quien, en una final donde Orozco empezó sumando los dos primeros puntos de sets, dejaría a Pablo con la miel en los labios y una medalla de plata muy merecida. 3-7 para el madrileño.
Magali Foulon, bronce bien conseguido
Meritoria y bien merecida medalla de bronce de Magali Foulon tras llegar a semifinales frente a Lucía Rodríguez quien, finalmente, se quedaría con el oro. 135 a 141 para la Catalana que dejaba a Foulon con la medalla de bronce (este Gran Premio no hay lucha por ese metal y se concede a las dos eliminadas en la ronda de semifinales).
Antonio Vázquez y Raúl Riera
Finalmente participaron ambos dejando su buen hacer en la competición y dando el espíritu de veteranía que se espera de ellos. Sin duda, una gran noticia para el tiro con arco que estos dos grandes deportistas continúen en la línea de tiro.
Buenas sensaciones para el resto de la expedición
Los arqueros ibicencos pueden considerar este gran premio como esa chispa de moral que necesitan cada vez que compiten pues ven recompensados sus esfuerzos con buenas sensaciones a la hora de tirar.
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